No se recomienda dejar un carro estacionado con las ruedas giradas por varias razones importantes que tienen que ver con la seguridad, el desgaste del vehículo y la funcionalidad en el entorno donde se parquea. Aunque puede parecer una acción sin consecuencias, hacerlo de manera habitual o en ciertos contextos puede generar problemas que conviene evitar.
Primero, desde el punto de vista de la seguridad vial, dejar las ruedas giradas puede representar un riesgo, especialmente si el carro está estacionado en una vía plana. Si por alguna razón el freno de mano falla o el vehículo se mueve, las ruedas giradas pueden hacer que el carro tome una dirección inesperada, invadiendo otros carriles, aceras o golpeando objetos o personas. Esto es distinto en una pendiente, donde sí se recomienda girar las ruedas hacia el andén como medida de prevención.

Segundo, hay un impacto en los componentes mecánicos del sistema de dirección y suspensión. Cuando las ruedas quedan giradas durante mucho tiempo, especialmente si el auto está cargado o en una superficie inclinada, se genera tensión sobre partes como la cremallera de dirección, rótulas y terminales. A largo plazo, esto puede acelerar el desgaste de estos componentes y provocar reparaciones costosas.

Tercero, en términos de comodidad y espacio urbano, un carro con las ruedas giradas ocupa más espacio y puede dificultar la circulación o estacionamiento de otros vehículos. Las ruedas sobresalen del espacio previsto y en calles estrechas pueden suponer una obstrucción, incluso aumentando el riesgo de que otro vehículo roce las llantas o el guardabarros al pasar.
Finalmente, desde una perspectiva práctica, algunos sistemas de seguridad del vehículo moderno pueden interpretar las ruedas giradas como una señal de maniobra pendiente o incluso interferir con sensores de estacionamiento. Además, si otro conductor intenta empujar o remolcar el carro por una emergencia, las ruedas giradas dificultan el movimiento recto del vehículo. Por todo esto, salvo en pendientes donde se aplica una excepción, lo más recomendable es siempre dejar el auto con las ruedas rectas al estacionarlo.